
Los cursos intensivos de inglés, bien para aprender el idioma o para prepararse para un examen de Cambridge English, pueden ser muy útiles. Pero también pueden ser dañinos. Elegir este formato de curso cuando realmente no te va a servir de mucho sólo te llevará a sentir que no puedes con el inglés, que es imposible o, peor, que el inglés no es lo tuyo y renunciar.
Y, ojo, yo soy muy a favor de hacer cursos intensivos. Casi todos los años desde que soy profesora de inglés he preparado a estudiantes durante los meses de junio y julio para los exámenes de Cambridge y este año no será excepción. Pero sí creo firmemente que no son para todo el mundo.
Por eso, hay que pensar en tres factores antes de decidir pagar para hacer un curso intensivo este verano.
- Tu nivel
Antes que nada, debes evaluar tu nivel actual. Los cursos intensivos preparatorios para los exámenes de Cambridge no están pensados para ayudarte de ir de un nivel principiante a un experto en tres semanas (por muy intensivo que sea). Si llevas 10 anos sin tocar el inglés ni practicar y ahora estás pensando un hacer un intensivo para conseguir el B1 Preliminary o el B2 First, quizás un intensivo no es la mejor forma para ti de conseguir tus objetivos.
Sin embargo, si has estado estudiando durante un tiempo y sientes que necesitas un empujoncito para alcanzar ese nivel deseado, entonces sí pueden funcionar para ti.
2. Tus objetivos
Tus objetivos son el factor clave en decidir si lanzarte a un curso intensivo de inglés o no. Por ejemplo, si no has tocado el idioma en mucho tiempo pero lo que sí quieres es aprender y refrescar la memoria, podría ser una buena idea. Si llevas tiempo estudiando y quieres familiarizarte con el formato del examen, también puede funcionar para ti.
Pero, al igual que con el factor anterior, si tu deseo es aprender un idioma de 0 a B1 y aprobar un examen en 50-60 horas de clase sólo, va a ser complicado.
3. Tu dedicación
Hay que pensar en el tiempo que vas a tener durante esas 3 o 4 semanas del curso intensivo. Un curso intensivo es precisamente eso intenso. Aparte de tus clases diarias, también tendrás mucho que estudiar y muchos ejercicios que hacer.
Digo esto porque cuando al final lleguen al intensivo, muchos se sorprenden con la cantidad de trabajo que tienen que hacer en casa. Mínimo hay que pensar en dedicar, aparte de las horas de clase que tengas, unas 4 horas de estudio y ejercicios cada día. Por lo que es muy importante pensar si estás dispuesto a sacrificar esas tardes de playa o de piscina en verano para dedicarlo a conseguir tus objetivos.
Lo dicho, soy muy a favor de los cursos intensivos. Hay muy buenos profesores en este mundo que te pueden ayudar a alcanzar tus objetivos en muy poco tiempo. Pero hay que pensárselo muy bien antes de apuntarse.